¿Cómo guardar tu ropa en los cambios de estación?

¿Qué requisitos debe cumplir una prenda para formar parte de tu armario?

Quizá os sintáis identificadas con las siguientes frases: “No sé qué ponerme” o “No tengo que ponerme”, cuando en realidad nos falta hueco en el armario.

Con la llegada del fast fashion hemos caído en la tendencia de comprar prendas por impulso, tendencias que solo funcionan bien a corto plazo, lo cual te empuja a comprar más y más prendas en cuando llega la siguiente temporada.

Esto se traduce en tener el armario abarrotado, ya que “¿como lo voy a regalar? si está nuevo…” Caemos en un círculo vicioso que parece no tener fin.

Pero no es así. Uno de los movimientos que promovemos en BOURAS es la compra consciente y responsable, por eso hoy os preguntamos lo siguiente:

¿versatilidad o monotonía?

Prendas que solo te puedes poner de una manera en concreto que no dan lugar a creatividad, frente blusas con las que te puedes reinventar cada mañana y darle un estilo diferente a tu look sin tener que colapsar tu armario con cientos de prendas que quizá te pones o quizá no.

Nosotras siempre os animamos a que optéis por comprar prendas versátiles y ponibles, por ello os presentamos tres modelos de blusa cruzada-reversible, edición verano (para que este verano sea de todo menos monótono!)

Guardar la ropa adecuadamente durante los cambios de estación es esencial para mantenerla en buen estado y organizar tu armario de manera eficiente. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo hacerlo:

1. Limpieza previa: Antes de guardar la ropa, asegúrate de lavar o limpiar todas las prendas. Las manchas y la suciedad pueden empeorar con el tiempo si se almacenan durante mucho tiempo.
2. Clasifica la ropa: Divide tu ropa en categorías, como camisetas, pantalones, vestidos, abrigos, etc. Esto facilitará la organización cuando llegue el momento de volver a usarlas.
3. Despeja el armario: Vacía completamente tu armario para poder ver todo lo que tienes y limpiar bien los espacios.
4. Dona o descarta: Aprovecha esta oportunidad para deshacerte de la ropa que ya no usas o que ya no te queda bien. Puedes donarla o desecharla de manera responsable.
5. Almacenamiento adecuado: Utiliza contenedores o cajas de almacenamiento para guardar la ropa fuera de temporada. Puedes optar por bolsas de almacenamiento al vacío para reducir el volumen y proteger las prendas del polvo y la humedad.
6. Ropa delicada: Para prendas delicadas, utiliza papel de seda o bolsas de tela para protegerlas y evitar que se arruguen o se enganchen con otras prendas.
7. Etiqueta las cajas: Etiqueta cada caja o contenedor con el contenido para saber qué hay dentro sin tener que abrirlo todo.
8. Orden en el armario: Cuando vuelvas a colocar la ropa en el armario, organízala de manera que las prendas más adecuadas para la temporada actual estén a mano. Las prendas fuera de temporada deben estar en la parte posterior o en estantes superiores.
9. Cuidado de prendas especiales: Si tienes prendas especialmente valiosas o hechas de materiales delicados, como cuero, piel o seda, es mejor guardarlas en fundas de tela transpirable para protegerlas adecuadamente.
10. Revisión periódica: A medida que cambian las estaciones, realiza una revisión de tu ropa antes de sacar la ropa de la temporada anterior. De esta manera, podrás identificar qué prendas ya no necesitas o cuáles necesitan reparaciones.

Siguiendo estos consejos, podrás mantener tu ropa en buen estado y organizarla de manera eficiente durante los cambios de estación.